Ciudad de México, 28 de octubre de 2025. Aeroméxico presentó un recurso ante la Corte de Apelaciones del Undécimo Circuito de Estados Unidos para suspender una orden emitida por la administración de Donald Trump que obliga a disolver su alianza estratégica con Delta Air Lines antes del 1 de enero de 2026. La asociación, en vigor desde 2016, permite la coordinación en programación de vuelos, precios y capacidad en rutas entre México y EE.UU., generando ingresos compartidos anuales por 2.000 millones de dólares, según datos de la aerolínea mexicana.
La compañía argumenta que la terminación impondría «costos sustanciales» irrecuperables y violaría tratados bilaterales de aviación, solicitando una medida cautelar para mantener la operación durante el litigio.
Contexto de la decisión
La orden, dictada en septiembre por el Departamento de Transporte de EE.UU. (DOT), califica la joint venture como anticompetitiva y responde a denuncias de rivales como American Airlines, que alegan distorsión en el mercado transfronterizo. Bajo el acuerdo, Aeroméxico y Delta –que posee el 3,5% de la mexicana– comparten códigos en 100 rutas clave, transportando 5 millones de pasajeros al año y capturando el 25% del tráfico aéreo bilateral, valorado en 10.000 millones de dólares anuales según la International Air Transport Association (IATA).
Aeroméxico, en su apelación depositada el viernes ante la corte con sede en Atlanta, sostiene que la disolución requeriría reestructuraciones operativas y renegociaciones de slots aeroportuarios que costarían cientos de millones de dólares, sin garantía de reembolso si la decisión se revoca. «La sanción ignora los beneficios para consumidores y el cumplimiento de estándares antimonopolio, violando el Tratado de Cielos Abiertos de 1995», argumenta el documento judicial. Delta respaldó la moción, afirmando que la alianza ha reducido tarifas en un 15% en rutas clave como Ciudad de México-Atlanta.
Si el recurso prospera, la corte podría otorgar una suspensión temporal en semanas, permitiendo negociaciones durante el proceso, que podría extenderse hasta 2027. De lo contrario, la alianza termina, afectando 100 rutas y potencialmente 5 millones de pasajeros anuales, con pérdidas estimadas en 500 millones de dólares para Aeroméxico en el primer año, según proyecciones internas citadas en el recurso.
Tensiones regulatorias en aviación bilateral
La decisión del DOT surge de una revisión iniciada en 2024 por el Comité de Transporte de la Cámara de Representantes de EE.UU., presidido por Sam Graves (republicano), que investigó presuntas prácticas predatorias en el mercado México-EE.UU. Rivales como American y United denunciaron que la coordinación Aeroméxico-Delta reduce competencia, elevando precios en un 10% en rutas premium. El DOT, bajo la secretaria Sean Duffy, emitió la orden el 15 de septiembre, citando la Sección 412 de la Ley Federal de Aviación de 1994, que regula joint ventures.
Aeroméxico, fundada en 1934 y con ingresos de 15.000 millones de dólares en 2024, depende en un 20% de vuelos transfronterizos de su alianza con Delta, que facilita acceso a 300 destinos en EE.UU. La aerolínea mexicana, que transporta 50 millones de pasajeros anuales, ha invertido 500 millones de dólares en la asociación desde 2016, incluyendo hubs compartidos en Monterrey y Atlanta.
Delta, con una capitalización de 50.000 millones de dólares, ve la disolución como amenaza a su 10% de ingresos internacionales. Ambas compañías argumentan que la alianza ha bajado tarifas en un 15% y elevado puntualidad al 85%, per datos de la FAA.
La apelación se presenta en un clima de tensiones bilaterales: Trump ha criticado a México por «déficit comercial» de 150.000 millones de dólares anuales, y el Departamento de Comercio investiga aranceles a vehículos mexicanos. La corte, con precedentes como el caso de United-Lufthansa en 2019 (donde se mantuvo una JV similar), podría resolver en 60 días.
Aeroméxico y Delta mantienen operaciones normales mientras el litigio avanza. La aerolínea mexicana actualizará en aeromexico.com.














